“Detrás de todo gran hombre, siempre hay una gran mujer”
Recientemente ha fallecido Carmen Cuesta, muchos no la conoceréis ni sabríais quien era, para otros era la rosa número 14. La única superviviente del hoy conocido como “Las trece rosas” un grupo de mujeres, muchas de ellas adolescentes encarceladas y fusiladas por un régimen que relejo a la mujer a la edad media.
Además de este fallecimiento también recientemente ha desaparecido un Ministerio de igualdad al cual en otro articulo criticaba por su pasividad o mejor dicho por la poca publicidad que se daba o le daban a sus actuaciones, algunos las conocemos porque tenemos amigas muy involucradas en la lucha por la igualdad.
Pero en esta piel de toro en la que vivimos, que bien también se podía decir piel de vaca, hemos tenido y tenemos grandes mujeres de todas las ideologías épocas y clases, por mencionar algunas tenemos a una reina que no quiso ser una mera comparsa de su marido y es recordada como Isabel la Católica, una joven quinceañera comprometida con sus ideas y que murió durante la revolución de Asturias, Aida la Fuente, una inteligente política como Doña Clara Campoamor cuyo discurso en las cortes del 1 de Octubre de 1931 defendiendo el derecho al sufragio universal debería de ser de obligada lectura para todo político y persona que se precie, La señorita Victoria Kent primera diputada en Cortes y Directora General de Prisiones, Beatriz Galindo, Agustina de Aragón, Rosalía de Castro, Clara del Rey, Manuela Malasaña,…. y no me añado mas nombres, que existen, por no alargar de manera inimaginable este articulo.
En España toda la vida han existido mujeres brillantes en su campo, pero a la mayoría de los hombres les cuesta admitir que una mujer les supere y siempre se le ha relegado a un segundo plano, hoy por hoy gracias a la lucha de estas y muchas otras mujeres que lucharon y luchan por que se reconozca su derecho a no ser diferentes, organismos tan conservadores como el ejercito ha admitido que tengamos mujeres en puestos de responsabilidad como pilotos de combate, capitanes de navío de guerra o con mando en regimientos de infantería.
Por eso sorprende posturas como la de la iglesia en la que a pesar de ser un país mayoritariamente mariano se sigue degradando a la mujer o declaraciones del políticos como el alcalde de Valladolid me hacen pensar que se ha suprimido un Ministerio todavía muy necesario aunque demasiado pasivo en sus actuación o en su propaganda.
Posiblemente no habré sido capaz de transmitir todo mi apoyo a una amiga que ha tenido una semana muy dura, y seguramente abre caído en muchos tópicos pero eso posiblemente se deba a mi falta de educación en la igualdad espero que la reciente secretaria de estado se encargue que en la asignatura de educación para la ciudadanía (por ejemplo) que mi hijo y mi hija tengan las mismas oportunidades en esta vida que están empezando. Aunque sigo pensando que muchas iniciativas no me gustan pero eso lo dejare para discutir otro día.
En memoria de mis abuelas y de muchas otras mujeres que no pudieron disfrutar de las libertades que tiene hoy mi hija.
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